Las ráfagas no fueron tan importantes, la más fuerte llegó a los 45 kms. pero la falta total de mantenimiento provocó la caída de la torre

El viento que sopló en la tardecita del lunes, derribó el viejo tanque de agua potable que está en la actual planta potabilizadora. Las ráfagas no fueron tan importantes, llegaron a los 45 kms., aunque la falta de mantenimiento de la torre de caño incidió para que terminara cayendo.

Durante la caída también golpeó en el edificio de la planta provocando un daño en el techo y en la pared lateral. Por suerte no hay que lamentar personas heridas.

El tanque había sido colocado en el año 2003 durante la gestión del Pte. Comunal, Aníbal Ferrero, aunque nunca fue utilizado ya que no hay distribución domiciliaria de agua en la localidad.